Rolando Daza
Apunte:
Conforme pasa el tiempo, la tecnología y en particular el mundo digital toma relevancia. Lo analógico queda en segundo plano, mientras las nuevas tecnologías avanzan aceleradamente.
La apuesta de Irapuato y del gobierno de Guanajuato es la Mentefactura, la cual es un proceso de producción que busca generar, transformar y utilizar el conocimiento para ofrecer soluciones. La Mentefactura no busca crear un producto a partir de una materia prima utilizando las manos o máquinas, su objetivo es crear alternativas y/o soluciones que logren resolver las problemáticas a través de la creatividad e innovación de las personas.
Si bien durante la pandemia del COVID-19 las compañías que se transformaron digitalmente crecieron cinco veces más que las que no, ahora, ya en un escenario post-pandemia, los desafíos siguen estando muy presentes y para Guanajuato más.
El primer desafío que debe atender el estado es que debemos de ir rápido. Nos tardamos en subirnos a este mundo que desde finales del siglo pasado se ha generado. El futuro ya nos alcanzó, aquellos que no fueron alcanzados por la tecnología tendrán que hacer un gran esfuerzo para lograr competitividad.
El segundo desafío, es la adquisición de talento tech; uno de los principales motores de la transformación y el desafío más grande para el desarrollo de innovación al que nos enfrentamos actualmente.
La encuesta “Escasez de Talento” de Manpower Group, señala que el 69% de las empresas a nivel mundial reportan escasez de talento tech. En México, el 60% de las empresas han manifestado dificultades para encontrar perfiles profesionales con las competencias adecuadas para cubrir puestos tecnológicos. Para el proyecto de Guanajuato, es preocupante este escenario si consideramos que las empresas están pasando por una transformación digital, y es mayor el número de multinacionales que están invirtiendo fuertemente en la innovación de la tecnología.
Un ejemplo es Tesla. Si recuerdan, Elon Musk, Director Ejecutivo de la compañía, anunció que ya no son una empresa de manufactura de automóviles, sino una empresa de robótica.
Tesla es un ejemplo de que todos estamos sumergidos en la misma carrera tecnológica. Por esta razón el estado que se dice orientado a la Mentefactura, debe tener estrategias que permitan generar innovación. ¿Cómo hacerlo? Mediante una estrategia tecnológica proactiva.
Para realizar esta estrategia, se debe definir el objetivo. Es decir, ¿cuál es el objetivo tecnológico del estado y sus empresas? El objetivo puede ser desarrollar tecnología para eficientizar procesos o para ofrecer un nuevo producto o generar productos mejorados. Es necesario que el Instituto de Innovación, Ciencia y Emprendimiento para la Competitividad (IDEA GTO), se pregunte ¿el objetivo meta es el que beneficie a nuestra población?
El tercer desafío es la adquisición de talento. Para el éxito del proyecto se debe focalizar en adquirir o generar el mejor talento nuevo en tecnología, aquí es donde nuestro estado cojea, tenemos mucha mano de obra, pero no el talento para innovar, aprovechar o desarrollar conocimiento. Para ello, es necesario acercarse a universidades y crear alianzas para un programa de prácticas profesionales, o iniciar un proceso de scouting con talento joven. En caso de tener un presupuesto más amplio, es importante definir con precisión las necesidades de desarrollo tecnológico.
También se tiene que considerar el proceso de producción. En esta etapa, la metodología Scrum es una de las más utilizadas por las empresas para llevar a cabo la planeación y el manejo de los proyectos de desarrollo. ¿Estamos capacitados?
Atender estos desafíos, ayudará a desarrollar mayores ventajas competitivas e involucra un mayor número de personas que se beneficien de este gran proyecto para nuestro estado y nuestra ciudad. En definitiva, el desafío está en la mesa y debe impulsar a las ciudades de nuestro estado. Se debe empezar a ver la transformación digital como una ventaja competitiva.
Aún no hay comentarios, ¡añada su voz abajo!