Ciudad de México, 06 de junio de 2024 – En una rueda de prensa realizada en Palacio Nacional, el Secretario de Salud de México, Jorge Alcocer, desmintió el informe emitido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que señalaba la primera muerte en el país a causa de la gripe aviar AH5N2.
Alcocer aclaró que la persona de 59 años, cuyo fallecimiento fue reportado, no murió debido a esta enfermedad.
El funcionario hizo un llamado a la población para que sea cautelosa al recibir información, argumentando que el comunicado de la OMS era inexacto.
«El comunicado de la Organización Mundial de la Salud es erróneo, ya que menciona un caso fatal que no corresponde a la realidad; la persona murió por otra causa y aún no ha sido dictaminado oficialmente», expresó Alcocer durante la conferencia matutina.
Alcocer también tranquilizó a la población, asegurando que no hay motivos para evitar el consumo de pollo u otros productos avícolas, ni para preocuparse excesivamente.
Explicó que el paciente en cuestión, quien padecía diabetes y problemas renales, fue atendido en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, donde se le realizaron varias pruebas. Una de estas pruebas detectó la presencia del virus AH5N2, relacionado con la gripe aviar.
«Este paciente no presentaba síntomas relacionados con la gripe aviar, venía del Estado de México con manifestaciones de otra índole», especificó Alcocer.
Añadió que el virus AH5N2 afecta principalmente a las aves y que las infecciones en humanos, especialmente en trabajadores de granjas avícolas, suelen ser leves y no presentan las manifestaciones observadas en este caso.
El Secretario de Salud descartó la posibilidad de transmisión de humano a humano en este caso específico, ya que el paciente no tenía antecedentes de contacto cercano ni vecinal. Afirmó que hasta el momento no se ha encontrado evidencia de transmisión interpersonal.
Alcocer concluyó que este caso podría servir como una advertencia epidemiológica para los trabajadores que tienen contacto con aves, pero subrayó que no hay razón para alarmarse.
