Irapuato, Gto., 2 de marzo de 2025.- El Movimiento Familiar Cristiano y los Decanatos de la Diócesis de Irapuato se unieron este día en una marcha cargada de simbolismo, bajo el lema de defender la vida y valorar la familia como un regalo divino. Cientos de personas, vestidas de blanco, recorrieron las calles de la ciudad para expresar su firme compromiso con estos valores fundamentales.
La movilización, que partió desde el parque Irekua, se dirigió por la Avenida Guerrero, donde los participantes exhibieron mantas con mensajes en defensa de la vida. Un símbolo de unidad y amor familiar encabezó el recorrido: una familia, junto a una personificación de la Sagrada Familia, representando el modelo de vida familiar basado en valores y fe.
Al final de la marcha, los asistentes llegaron a la Catedral de Irapuato, donde fueron recibidos por el obispo Enrique Díaz Díaz y un grupo de sacerdotes provenientes de distintos decanatos de la ciudad. El padre Emmanuel Pérez Alonso, responsable de la marcha convocada por la diócesis, subrayó la importancia de visibilizar la relevancia de la familia y la vida en la sociedad.
“Hoy, en el Día Nacional de la Familia, queremos recordar que la familia es un don, un regalo invaluable que debemos cuidar y valorar”, expresó el padre Pérez Alonso.
Por su parte, líderes de los movimientos familiares cristianos, que participaron en la marcha, destacaron que, aunque la estructura de la familia ha evolucionado con el tiempo y los avances sociales y tecnológicos, sigue siendo una de las instituciones más significativas en la sociedad. La familia sigue ofreciendo amor, apoyo, formación en valores y un sentido de pertenencia.
Esta marcha, organizada por la comunidad católica de Irapuato, fue un claro testimonio del compromiso por defender la vida y la familia, promoviendo un mensaje de unidad, amor y respeto por la dignidad humana.