Irapuato, Guanajuato.- Durante el segundo bimestre de 2025, los accidentes viales en el municipio de Irapuato mostraron un incremento del 11% en comparación con el mismo periodo del año anterior, según el Observatorio Ciudadano Irapuato ¿Cómo Vamos?. En total, se registraron 173 accidentes, frente a los 144 del bimestre correspondiente de 2024.
Las colonias más afectadas por percances viales fueron Barrio de San Vicente, Las Heras y Progresiva El Jaral, cada una con seis incidentes, y Primero de Mayo con cinco. Respecto a las calles, el bulevar Solidaridad lideró la lista con 20 accidentes, seguido por Mariano J. García con 14 y Cuarto Cinturón Vial con 12.
El informe también detalla que en marzo y abril de 2025 se reportaron cuatro fallecimientos y 129 personas lesionadas como resultado de estos accidentes. Las causas más frecuentes incluyeron virajes bruscos (44 casos), no ceder el paso (40) y no guardar distancia al manejar (24).
De acuerdo con las estadísticas, en Irapuato se produjo un accidente aproximadamente cada 8 horas y 27 minutos, con un aumento del 20% en comparación con el primer bimestre de 2025. Los días lunes, martes, miércoles y domingo fueron los que mostraron incrementos en el número de accidentes, mientras que viernes y sábado presentaron disminuciones. El domingo concentró el 27% de los percances del segundo bimestre.
El análisis de horarios indica que la franja de mayor riesgo es de 12:00 a 17:59 horas, donde se registró el 29% de los accidentes. Los incidentes laterales representaron el 41% del total, seguidos por los accidentes contra objetos fijos, que constituyeron el 29%.
El Barrio de San Vicente se caracteriza por sus calles angostas y el elevado flujo vehicular, convirtiéndolo en un punto crítico para la seguridad vial, como se evidenció en un informe previo que contabilizaba 957 accidentes en todo el municipio durante 2024. Las tres colonias con más reportes de accidentes en ese período fueron Las Heras (43), Progresiva El Jaral (41) y Barrio de San Vicente (27).
Las estadísticas sugieren la necesidad de fomentar una cultura de manejo más responsable entre los conductores, así como un análisis profundo sobre la infraestructura vial en colonias con alto índice de accidentes, donde el diseño de las calles puede contribuir a la siniestralidad.