Rolando Daza
Apunte:
En diversas ocasiones hemos escuchado hablar del “poder mental” que las personas debemos tener. En diversos espacios, eventos y circunstancias se manifiesta esta “virtud” que toda persona debe alcanzar para poder enfrentar los diversos retos que se enfrentan en la vida.
La fuerza mental se requiere en el ámbito familiar, social, empresarial y político. En diversas ocasiones alcanzamos las metas por la fuerza mental. Para los mexicanos el trabajar en su psicología es básico para crecer.
El mes pasado, Roger Federer, ocho veces campeón de Wimbledon, pronunció un discurso ante estudiantes que se graduaban de la Universidad. Utilizó las “lecciones de tenis” como metáfora. Aunque nunca se refirió explícitamente a ellas, Federer mostró aprecio por los principios psicológicos que sustentaron su larga y exitosa carrera como tenista.
Comentó que como tenista profesional debería poder jugar bien durante las dos primeras horas. En ese período, estás en forma y alerta, pero después te cansas, te tiemblan las piernas y, lo que es más importante, tu mente empieza a divagar. Fue vital que Federer se diera cuenta de que el transcurso de un partido de tenis era exigente no solo a nivel físico, sino también psicológico.
Es una lección de fortaleza mental. Es una habilidad que la gente puede perfeccionar utilizando algo que los psicólogos llaman el modelo 4C, el cual implica centrarse en el control, el compromiso, el desafío y la confianza.
Implica tener un sentido de control sobre los pensamientos, emociones y comportamiento en situaciones desafiantes. Aquellos con altos niveles de fortaleza mental pueden regular sus reacciones al estrés y mantener la concentración y la compostura bajo presión. Ser mentalmente fuerte ayudó a evitar que la mente de Federer divagara cuando estaba cansado (posiblemente hacia la duda) y promovió su concentración, incluso cuando su mente y su cuerpo estaban exhaustos.
Cada vez más, los grandes torneos de futbol se han tenido que ganar en una tanda de penaltis (vean los actuales juegos de la Copa América y de la Eurocopa). Es una dura realidad que convierte los sueños en pesadillas. Un solo tiro, un momento fugaz que dura unos segundos, la desilusión o el triunfo.
Para muchos, la perspectiva de esta prueba definitiva de valor y concentración les produce una sensación de pavor. En ese momento, el peso de las esperanzas de una nación entera recae sobre sus hombros, una carga tan inmensa que hasta los profesionales más curtidos en la batalla pueden derrumbarse.
El mayor secreto del gran éxito de Federer fue su perspectiva sobre cada punto que jugó en su carrera. Les dijo a los graduados que en su carrera ganó casi el 80% de los partidos, pero solo el 54% de todos los puntos por los que compitió. Esto fue un recordatorio de que incluso los mejores tenistas ganan solo aproximadamente uno de cada dos puntos. Los mejores jugadores, los profesionales exitosos son aquellos que están acostumbrados a aceptar los fracasos además de sus éxitos.
La aceptación de los reveses, de las frustraciones es una característica importante de los deportistas y de las personas exitosas, puede actuar como motivador para el desarrollo y el éxito continuo. Para los guanajuatenses en cualquier ámbito, la historia se puede reescribir. Si las personas se preparan mentalmente pueden saltar en cualquier campo con pleno control de sus pensamientos, transformando la ansiedad y la duda en concentración y determinación inquebrantable.
