Rolando Daza
Apunte:
En este tiempo, la imposición de aranceles a México por parte de Estados Unidos genera incertidumbre y desaceleración económica. Los escenarios son negativos para el gobierno (tanto federal como estatal) que sigue mezclando la política populista con el trabajo de fondo para librar esta crisis que puede afectar al régimen porque los escenarios lo dejarían sin dinero. La fuerte dependencia económica con Estados Unidos reduce el margen de acción y limita las opciones para reducir el impacto.
Mes y medio de la presidencia de Trump ilustra el animal político que está comenzando su segundo periodo. Más soberbio y vanidoso, más malcriado y cínico, bien posicionado en el poder y con un mandato popular que no se veía desde hace años. Ya está claro que los rasgos que mostró en su primer periodo han evolucionado al chantaje para que las cosas se hagan a su manera y en el momento que quiera.
La acción prudente de la presidenta fue vista como algo positivo para tranquilizar el mercado y a los políticos. Su serenidad y paciencia, como de “Kalimán”, parece una actitud tibia más que una estrategia calculada.
Por desgracia la economía mexicana padecerá de la incertidumbre, afectando la inversión, el empleo, el consumo, la inflación, además se aproxima la reforma judicial. También se prevé el estancamiento en la economía ya que al gobierno no quiso reducir sus iniciativas y produjo una política fiscal irresponsable en 2024. Por lo tanto, en el 2025 el gobierno no va a impulsar la economía a pesar del Plan México y el Plan Nacional de Desarrollo.
De acuerdo con un análisis de Goldman Sachs, con el 25% de aranceles, el impacto para México alcanza los 501 mil millones de dólares, casi 100 mil más que Canadá, más de 130 mil millones que China, y el 80% de lo que le costaría a toda la Unión Europea.
Ahora preguntémonos, ¿los aranceles deben preocupar a Guanajuato? Los datos dicen que sí, pues el 87% de lo que el estado exporta tiene como destino los EUA. Especialistas advierten sobre los posibles efectos en la economía local y la necesidad de estrategias para minimizar el impacto en la industria y el comercio; el efecto en el sector automotriz, en los fabricantes de calzado y el sector agroindustrial, tendrá un impacto directo en los niveles de competitividad del estado de Guanajuato.
Las amenazas de aranceles han detenido exportaciones ante la incertidumbre, produciendo que el consumo se reduzca, lo que significa una disminución en la producción y posiblemente el recorte de personal.
Según el Peterson Institute for International Economics y Brookings Institution, la economía mexicana podría caer más de 3%, con una reducción de 26% en exportaciones y la pérdida de 2.2 millones de empleos.