Cotija, Michoacán, 7 de diciembre de 2024.- La síndico del ayuntamiento de Cotija, Michoacán, Blanca María Ibarra Ochoa, fue designada por el Congreso del Estado como la alcaldesa sustituta de ese municipio, luego de que el presidente municipal constitucional, Juan Pablo Aguilar Barragán, huyera y abandonara el cargo desde el primer día de su administración.
Este miércoles, el Pleno de la 75 Legislatura local, tomó protesta a Blanca Ibarra como presidenta municipal sustituta de Cotija, Michoacán, para el periodo constitucional 2024-2027.
En sesión extraordinaria, los legisladores votaron a favor del Proyecto de Decreto puesto a consideración por la Comisión de Gobernación, quienes determinaron la elegibilidad de la ciudadana, ante la propuesta de la Comisión Ejecutiva Estatal del Partido Acción Nacional (PAN).
Conforme a las consideraciones del dictamen, la designación de Blanca María Ibarra, se dio luego de que el Congreso del Estado recibió la comunicación del Secretario del Ayuntamiento de Cotija, Michoacán, Alberto Contreras Mendoza.
El documento hace del conocimiento el término de la licencia autorizada a Juan Pablo Aguilar Barragán, donde también se informa que no se ha presentado a su despacho.
Toda vez que el alcalde no se presentó por más de 60 días, el Congreso del Estado determinó quién debía asumir las funciones y responsabilidades de dicho municipio para evitar el estado de ingobernabilidad.
La designación de Ibarra Ochoa se da a pesar de que la dirigencia del PAN estatal, tuvo información desde las elecciones pasadas, sobre la situación de violencia por la que atraviesa ese municipio.
Además, que Acción Nacional también fue alertado por las áreas de inteligencia, de la relación familiar y delincuencial de algunos funcionarios del ayuntamiento, con el Cártel Nueva Generación (CNG), organización criminal que se adjudicó el secuestro y asesinato de la anterior presidenta municipal, Yolanda Sánchez Figueroa, también del PAN.
Las áreas federales de seguridad han sostenido que la exigencia del CNG a los funcionarios de esta administración, es pedir la salida del Ejército Mexicano de las calles y que designe a algún mando policial de sus filas.
Ese grupo delictivo ha perpetrado, desde hace tres años, múltiples ataques en contra de autoridades y de la misma población, además de asesinatos de funcionarios.