El pasado domingo 13 de noviembre se llevó a cabo la marcha a favor del Instituto Nacional Electoral (INE),en contra de la propuesta de reforma política electoral del presidente Andrés Manuel López Obrador, esta manifestación nacional fue convocada por unas 50 organizaciones civiles en la cual los ciudadanos empoderados dieron la sorpresa y desató un cruce de cifras donde se dijo que asistieron desde 12,000 hasta 640,000 personas dependiendo de quién lo diga.
Otro hecho significativo es que en esta marcha se logró juntar a la fragmentada coalición Va por México, donde acudieron distintos políticos del Partido Acción Nacional (PAN), del Partido de la Revolución Democrática (PRD), y del Revolucionario Institucional (PRI) destacando su polémico dirigente Alejandro Alito Moreno, quien debe de cuidar muy bien su actuar y definir si está con la coalición o con Morena.
José Woldenberg, primer presidente del extinto Instituto Federal Electoral, órgano que antecedió al INE, y único orador en la protesta, llamó a defender el sistema electoral del país y expresó «No a la pretensión de alinear a los órganos electorales a la voluntad del Gobierno, no al autoritarismo. Sí a la democracia; sí a un México democrático».
Esta marcha obliga a la reflexión, esta marcha fue para defender la democracia, que beneficia a todos los partidos del país y sus respectivos actores políticos. Para exigir transparencia en los procesos electorales y no repetir fraudes como el del 88, cuando Manuel Bartlett Díaz, desde la secretaría de Gobernación, operó la caída del sistema, para no reconocer la victoria del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano.
Todos los ciudadanos que marcharon en el ejercicio de sus derechos con diferentes formas de pensar, distintos intereses y diversas plataformas políticas e ideológicas, es un preámbulo de lo que habrá de ahora en adelante, hasta la elección federal del 2024, lo que obliga a algunos dirigentes y políticos a definirse, a ponerse del lado de los ciudadanos, abanderar sus causas y los problemas sociales de salud, empleo, economía e inseguridad.
Los ciudadanos demostraron que cuando un tema les duele e interesa, salen a manifestarse, el mensaje es que están observando a los gobernantes, políticos y partidos políticos, salieron a defender al INE, porque las elecciones son la manera que conocen de hacer cambios de manera pacífica, mediante las cuales castigan o dan la oportunidad a los candidatos.
Ahora falta ver si los dirigentes de partidos políticos y gobernantes acusan de recibido este mensaje, si su actuar cambia y sus propuestas son apegadas a las necesidades de los ciudadanos, buscando el bien común, apegados a la cultura del derecho, con transparencia y rendición de cuentas, recuerden que los ciudadanos los estamos observando.
