Rolando Daza
Apunte:
Estemos preparados. Más nos tardamos en apuntarlo, que en lo que se realizó. La comunicación es empleada brutalmente para mantener el poder. El presidente de la república indicó que establecerá su postura respecto a las consultas sobre las demandas de Estados Unidos y Canadá en el desfile del 16 de septiembre. ¿Qué tal?
Consideremos que la parte de la controversia es entendida a medias por el presidente López Obrador. Consideremos que a las Secretarías de Economía, de Energía y de Gobernación, puede que sí les quede claro, pero no aclaran la visión del presidente, desvirtúan la controversia.
Bajo la misma premisa, lo que sí comprende el presidente es que tiene frente a él una oportunidad de instigar el respaldo popular para retener y acrecentar su poder frente al reclamo americano y canadiense.
Hacía tiempo que no existía una situación así, AMLO tendrá la posibilidad de convocar a los mexicanos a “defender la soberanía nacional”, frente a las “ambiciones” de los gobiernos de Estados Unidos y de Canadá.
En la mañanera del viernes pasado dijo: “me llama la atención que haya tanto traidor a la patria, que en vez de defender a México defienden los intereses de países y empresas extranjeras. ¡Es increíble!”.
Esa será la lexis o hilo conductor de sus mensajes, de su comunicación masiva (y de redes sociales) que tendrá preparada.
El presidente no contempla los tiempos fijados en el Tratado, le tienen sin cuidado. Él observa que el ánimo popular de la fiesta de la Independencia será el apropiado para lanzar una campaña nacionalista.
En el grito del 15 de septiembre, dirá algo como “¡Arriba la soberanía nacional!” o, “¡Viva Pemex y la CFE del pueblo mexicano!” o algo similar.
El enemigo se hará presente, ya no serán únicamente los conservadores, sino el imperialismo, algo mucho más poderoso para convocar el respaldo de la población.
En el discurso del 16 de septiembre señalará que cualquier intento de intromisión va a enfrentar al pueblo mexicano. El estandarte de la visión populista estará preparado.
Todo lo tendrá dispuesto, esperemos que su gobierno también esté preparado para las reuniones que se realicen para atender las consultas demandadas a más tardar el próximo 20 de agosto. En octubre conoceremos si las consultas lograron evitar el litigio o estaremos en el más serio desacuerdo comercial entre México y sus socios desde que está vigente un tratado comercial.
Por parte de los ciudadanos estemos preparados por si logra “sacar” el sentimiento nacionalista en torno a su gobierno, tendrá condiciones ventajosas en las carreras electorales del 2024.
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