Rolando Daza
Apunte:
A final del año se prevé un cierre difícil, estamos como país sin considerar la situación económica mundial y la que vivirá nuestro principal socio comercial. La mayor parte de los expertos ya no se pregunta si habrá una recesión o no en los siguientes meses. La duda que flota es de qué profundidad será y cuál su duración.
La consultora KPMG realizó entre 1 mil 300 directivos de empresas globales una encuesta donde el 86% coincide en que tendremos una recesión en los próximos 12 meses. El 58% considera que ésta será corta y relativamente suave.
En México, la encuesta mensual de Banxico entre expertos indica que el 54% de los participantes considera que el clima para hacer negocios empeorará en los siguientes seis meses, mientras que solo el 11% observan que mejorará.
Esta situación nos afectará indudablemente, sin embargo, los mexicanos estamos sin considerar lo complejo del próximo año: la desaceleración económica y la alta inflación. Con estas variables y otras la demanda de tarjetas de crédito en nuestro país se observa en aumento a pesar de este escenario.
La calificadora de riesgo Fitch Ratings reporta que, con las altas tasas de interés, la colocación de tarjetas de crédito en tiendas y bancos seguirá creciendo porque a la población no le preocupa endeudarse, no observa la poca relación que tiene la tasa de interés de referencia de Banxico con la que ofrecen los plásticos con tasas de hasta tres dígitos.
La empresa Prosa señaló que se espera un crecimiento en el uso de tarjetas de hasta doble dígito. El año pasado registraron 6,500 millones de transacciones en todo el año ahora van por lo menos para 8,000 millones de transacciones solo con tarjeta física.
En los primeros tres trimestres del año, se han hecho 4,372 millones de operaciones con tarjeta de crédito y débito, un 22.2% más que en el mismo periodo de 2021, de acuerdo con datos de Banxico.
Tal parece que la educación financiera en nuestro país, no ha tenido los resultados esperados, aún tenemos un gran rezago en el tema y si recordamos la última gran crisis en México, en 1993, los créditos de las familias se dispararon y se volvieron impagables.
La poca alfabetización financiera de los mexicanos es más que clara. Viendo los datos internacionales, México obtuvo una puntuación de 57 sobre 100 puntos en el Índice de Alfabetización Financiera 2021, por debajo de países como Perú, Alemania y Hong Kong, datos dados a conocer por la CNBV. Los últimos meses del año serán de relevancia, debido a que es cuando se registra un mayor consumo por la temporada navideña y el Buen Fin.
Hay muchas variables que son inciertas, tanto en el ambiente económico mundial como en las circunstancias locales. Fitch advierte que los clientes podrían reducir su capacidad de pago, que hacia adelante implique aumento de la morosidad.
A los escenarios que se pronostican hay que tomarlos con pinzas, seguramente las circunstancias van a cambiar. La clave hoy en las empresas y en las familias es cuidar su endeudamiento, ser flexibles para ajustarse al medio ambiente que se observa cambiante.
Aún no hay comentarios, ¡añada su voz abajo!