Dos hombres balearon esta madrugada una sucursal del supermercado Único de Rosario, Santa Fe, local que es propiedad de la familia de Antonela Roccuzzo, la esposa de Lionel Messi.
Tras bajarse de una moto, los agresores comenzaron a disparar contra la cortina cerrada del lugar y dejaron un mensaje escrito con bolígrafo en un papel amarillento.
El mensaje encontrado en el lugar del tiroteo, dirigido al capitán de la selección argentina rezaba: «Messi te estamos esperando, (el intendente (alcalde) de Rosario, Pablo) Javkin también es narco, no te va a cuidar».
La mayoría de los disparos impactaron sobre una de las tres persianas metálicas del establecimiento y se cree que los atacantes iban en moto.
A primera hora de este jueves, Javkin compareció ante los medios apostados en el lugar y responsabilizó del hecho a las bandas y a las fuerzas «que tienen armas y los que tienen la potestad de investigar los delitos», que tienen que «cuidar» a los rosarinos.
«Yo dudo de todo», dijo a la prensa el intendente (alcalde), quien contó que el día anterior mantuvo una reunión con la policía provincial, federal, aeroportuaria, la Gendarmería y la Prefectura Naval y señaló que «no hay persecuciones».
«Es muy alevoso», dijo Javkin, porque es «fácil» para la banda generar este hecho y «hablar de la persona más famosa del mundo», y se preguntó qué noticia es «más rápidamente viralizante en el mundo que atacar el local de Messi».
El alcalde insistió en que lo que buscaron los atacantes es «la repercusión» y pidió que se deje a la familia Rocuzzo abrir el local y trabajar.
Rosario es considerada la ciudad más castigada por la violencia en Argentina, golpeada por hechos de inseguridad por la acción de bandas de narcotraficantes.
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